Tras meses de confinamiento, el teletrabajo ha llegado a nuestras vidas para quedarse. Las empresas no han tenido más remedio que adaptarse a esta forma de trabajo, con mayor o menor éxito, y los empleados han tenido que montar la oficina en casa a contrarreloj.
Está más que demostrado que el teletrabajo reúne muchas ventajas , tanto para las empresas como para los empleados. Facilita la conciliación familiar y profesional, reduce costes a la empresas, aumenta la productividad de los empleados, permite mayor flexibilidad, etc.
A pesar de todas estas ventajas, la mayoría de los que teletrabajan desde sus casas, no cuentan con un espacio de trabajo optimo para el desarrollo de su actividad, y eso a la larga, pasa factura. Entre los problemas más habituales: el ámbito personal y profesional se confunden por no contar con el espacio apropiado, crece el sedentarismo, se dan interrupciones continuas, sobre todo en casas con niños, falta de concentración o problemas para desconectar.
Por ese motivo hoy vamos a ayudaros con una serie de tips, a crear la atmosfera de trabajo perfecta siguiendo los consejos de los expertos en interiorismo y recursos humanos:
El Espacio
Lo ideal es contar con una estancia o espacio dedicado especialmente para el trabajo, pero la mayoría vivimos en casas con espacio reducido y tenemos que adaptarnos a las nuevas circunstancias.
El salón , suele ser la opción más adecuada de la casa para instalar un rincón de trabajo. Para adaptarlo, es fundamental separar bien la zona de estar de la zona de trabajo y buscar un rincón, por muy pequeño que sea, para este cometido.
Muchas veces, una mesa pequeña pegada a una pared puede resolvernos la papeleta, otras, es la mesa del comedor la que se transforma en estudio improvisado. Si no existe esta opción, la isla de cocina es otra alternativa muy socorrida, si contamos con un taburete adecuado o como último recurso, un rincón de nuestro dormitorio.
Fotografía: Nicole Franzen / Alvhem
La iluminación
La iluminación es sin duda, el elemento fundamental a tener en cuenta en la elección del espacio de trabajo. Intenta situar la mesa lo más cerca posible de una fuente de luz, natural o artificial, que ponga el foco en nuestra zona de trabajo. Esta, deberá ser una luz blanca neutra que ayuda a la concentración.
Por otro lado, los expertos recomiendan tener una luz ambiental más cálida que facilita la relajación. En resumen, hay que combinar dos tipos de iluminación, una enfocada al espacio de trabajo (tipo lámpara sobremesa o flexo) y otra, más cenital. El objetivo es evitar sombras innecesarias.
Fotografías: wiesoeigentlichnicht blog / Riikka Kantinkoski para Finnish Design Shop
La mesa
Otra de las elecciones importantes que debemos tener en cuenta a la hora de crear nuestra zona de trabajo es la mesa. El tamaño no importa, pero si la altura . Las mesas estándar suelen estar diseñadas para gente alta, por lo que podemos optar por buscar unas patas a nuestra medida, o bien usar un reposapiés.
Los expertos apuntan a que la medida más adecuada para una buena realización de nuestro trabajo oscila entre 73 y 75 centímetros. Te aconsejamos una medida que te permita mantener la postura adecuada, con la espalda recta y las piernas en L.
Dato importante: las mesas de comedor suelen tener una medida distinta a las de escritorio, tenlo en cuenta antes de que sea demasiado tarde para tu espalda.
Fotografías: Heju / wiesoeigentlichnicht blog
El asiento
Si pasamos muchas horas sentados frente al ordenador, deberemos contar con una silla lo más cómoda y funcional posible . Las sillas ergonómicas han sido diseñadas para adatarse a nuestra fisionomía, y por lo tanto, son las más adecuadas para mantener la espalda recta, formando un ángulo de 90º.
Si no te van las sillas ergonómicas o no es posible instalarla en tu zona habitual de trabajo, podemos sustituirla por cualquier silla cómoda, más a nuestro estilo, pero que se adapte a la forma de la espalda y nos permita mantenerla erguida.
Fotografías: Lust Living / Arper
Todo en orden
El orden afecta directamente a nuestra concentración. Mantén tu espacio de trabajo lo más despejado posible y con los elementos indispensables a la vista. Busca un espacio cercano para guardar las cosas que no necesites en cajas, cajoneras, o muebles de almacenaje.
Fotografía: Monica Wang / Antoine Guillou Photography
El color
Aunque secundario, el color es otro de los elementos que puede afectar, tanto de forma positiva como negativa, al desarrollo de nuestro trabajo. Apuesta por colores neutros y calmados que te aporten relajación o incentiven tu creatividad. Es aconsejable que la mesa sea de un tono claro, blanca o madera.
Fotografía: the ultra linx / Adeline Pithois-Guillou
Plantas y decoración
Que se trate de un espacio de trabajo, no quiere decir que no debamos decorarlo. Es más, es aconsejable contar con elementos que nos inspiren, que despierten nuestra creatividad o que nos calme. Las plantas y flores , aportan mucha vida a cualquier espacio, también a la zona de trabajo.
Las velas, fotos, ilustraciones … también son elementos decorativos que pueden formar parte de este espacio.
Fotografía: Monica Wang