Mucho antes de que el relato de la inmediatez ocupara nuestros días, había objetos que podían durar décadas y décadas pasando de una generación a otra. Relojes, mesas, sillones... centenares de elementos sin fecha de caducidad. La moda todavía no pasaba por encima de ellos. Sin embargo, el universo de las tendencias más capitalistas surgido a finales del siglo XIX y principios del XX, o el también llamado “eterno retorno de lo efímero”, introdujo entre las sociedades modernas la necesidad de ir cambiando, cada cierto tiempo, el orden de nuestras posesiones.
Por suerte, hoy en día, todavía quedan amantes del coleccionismo y las piezas clásicas , que recuperan con mucho cuidado el mobiliario presente hace siglos. Tesoros de otra época que llegan hasta el presente para contarnos una vieja historia que sucedió cuando todavía no había wifi y las compras se hacían entre galerías y pasajes comerciales.
Para los nostálgicos del siglo XIX o el XX existe una manera muy sencilla de trasladarse al ambiente vivido en los primeros años del Modernismo —una explosión artística y literaria que revolucionó el mundo de las artes en general, incluyendo los carteles publicitarios y el mobiliario— y es hacerse con una de esas piezas únicas que entonces decoraban el interior de los cafés o las viviendas . Una manera, además, de alargar la vida útil de los objetos, sin caer en la espiral de consumo que nos lleva a querer poseer la última tendencia.
Ahora bien, ¿qué define a un objeto antiguo? ¿Es lo mismo que uno viejo? En el mundo de los anticuarios, un artículo antiguo es aquel que tiene más de cien años . Estos se caracterizan por tener buena calidad y se valora su origen e incluso, siempre que se sepa, quién lo realizó.
No se deben confundir las antigüedades con otros objetos, igual de bellos y elaborados, pero que pertenecen a décadas más próximas a la actualidad. Esos que, por ejemplo, siendo de los años 60 o 70 ya tiene un toque vintage que los diferencia de los actuales. Y es que si comparamos una lámpara del siglo XVIII con otra de finales del XX veremos con total claridad cómo la más antigua es portadora de un estilo único y alejado en el tiempo.
Azul Tierra, Alicante
De hecho, quienes se han dado cuenta de la fuerza que habita tras el mobiliario antiguo ya no pueden dejarlo escapar. Firmas y decoradores que como Toni Espuch, creador del espacio de interiorismo Azul Tierra , apuestan por acercar al público la belleza que se esconde tras los objetos clásicos.
Las piezas artesanales , los materiales nobles como la madera o el hierro y la huella que el paso del tiempo deja en cada pieza de mobiliario o complemento de decoración, son algunas de las características que se reflejan en los espacios y proyectos elaborados por el equipo de Espuch.
Azul Tierra es una apuesta segura en el universo del coleccionismo para aquellos que queráis empezar a introduciros en este sector. En su tienda, ubicada en Barcelona, encontraréis piezas únicas, antigüedades de países lejanos y objetos tan singulares como un maravilloso espejos Español escurialense del SVII, una mesa Fernandina del siglo XIX con sobre de piedra enmarcada, con cantos de bronce y patas talladas con serpientes entrelazadas, o un mueble años 70 de Roberto Monsani.
Uno de los consejos a destacar por este estudio de arquitectura e interiorismo es el de construir espacios con pocas piezas . Esto ayuda a crear una atmósfera relajante, cálida y confortable sin tener que recargar demasiado el interior. De hecho, a la hora de decorar, es muy importante mezclar elementos antiguos con otros más modernos para crear así un rincón armónico y equilibrado.
La Fábrica de Hielo
Fotografía: Pedro Jaén
Otro de los espacios de referencia en este sector es La Fábrica de Hielo , en Málaga. Un espacio con más de 1.500 m2 de exposición, dedicado a las antigüedades, a los objetos de decoración y a un estilo de vida de vanguardia. Si lo que buscas es inspiración, no puedes perderte su nueva nave en la que muebles y objetos decorativos de varios siglos conviven con otras piezas más contemporáneas .
Entre todo lo que podremos encontrar destacan piezas de cerámica popular, mimbre, objetos de jardín y mobiliario lavado hecho en el propio taller de LFDH . Además, La Fábrica de Hielo también cuenta con diseños propios en hierro y madera, así como lámparas.
Presente, pasado y futuro se unen en el Almacén Alquián & Hóptimo , una tienda online especializada en objetos decorativos del siglo XX y un estudio de interiorismo que cada día gana más adeptos con el lema de “objetos viejos con alma”. Gracias a su tienda podemos conectarnos con el mejor diseño del pasado y encontrar desde cerámica fat lava, hasta carteles antiguos de zoología y botánica o mapas . Aunque estas son algunas de sus obsesiones, en realidad ¡puedes descubrir de todo!
Pero además de su tienda, el estudio Alquián & Hóptimo también ofrece asesoramiento para ayudarte a crear el espacio que necesitas . En sus diseños siempre están presentes los viajes y las piezas que encuentran en cada uno de ellos. Objetos de un valor incalculable no solo por su belleza, sino por la historia que esconden detrás. ¿Te animas a sumergirte entre sus artículos de anticuario?
Proyecto de interiorismo Almacén Alquián & Hóptimo